El programa de donaciones de Cerámica Coboce busca mejorar la infraestructura de instituciones sin fines de lucro en áreas urbanas y rurales. Estas iniciativas han beneficiado hospitales, escuelas, orfanatos y refugios, entre otros, con una entrega mensual promedio de 1,000 metros cuadrados de producto.
Proceso de selección y entrega
Cada mes, se reciben alrededor de 10 solicitudes, evaluadas por un comité especializado que prioriza casos relacionados con educación, salud y albergues.
Procedimiento
Las peticiones se canalizan a través de Secretaría y se derivan a gerencia; para la evaluación se analizan las necesidades y la prioridad de cada institución; en cuanto a la aprobación, las solicitudes aprobadas pasan a la fase de formalización; para la entrega, los beneficiarios reciben el material tras firmar un acta y demostrar su uso adecuado y en el seguimiento, las instituciones que cumplen los requisitos son consideradas para futuras donaciones.
Entre las instituciones beneficiadas destacan colegios, orfanatos, y refugios para animales en especial en los departamentos de Santa Cruz, La Paz y Cochabamba, donde la cerámica se utiliza en áreas como dormitorios, comedores y baños.
Retos y perspectivas
La creciente demanda es un desafío, con solicitudes que llegan a 25 por mes en épocas como la navidad. “Donamos el material para que lo empleen en las áreas que requieren cada institución u organización beneficiada”, comentó Marco Antonio Herbas, responsable del Sistema Integrado de Gestión de Cerámica Coboce.
Pese a las restricciones económicas actuales, el programa mantiene su compromiso de apoyar a las comunidades más necesitadas, consolidándose como un modelo de solidaridad y responsabilidad social.
